Necesidades básicas

Una vez que hemos adquirido nuestro conejo enano, hay que procurar proporcionarle unas condiciones de vida agradables, para ello hay que conocer primero sus necesidades. Estos animales deben vivir en jaulas, a pesar de que se coloque en el jardín, ya que les encanta escarbar y pueden construir un túnel con mucha facilidad y escaparse antes de que nos demos cuenta. Las dimensiones mínimas de la jaula deben ser: 60-80 cm de largo x 50 cm de ancho x 80 cm de alto. 

La jaula debe tener una bandeja de plástico como base que mida de alto al menos 15 cm para que no tiren fuera la viruta o el serrín. Ambos materiales son muy útiles para absorber la orina del conejo. Un elemento muy recomendable es la caseta refugio, ya que tiene doble funcionalidad: sirve para esconderse y para subirse encima, lo cual les encanta para poder ver todo lo que les rodea. 

La temperatura óptima para los conejos enanos oscila entre 10 y 20°C, si bien los adultos pueden soportar temperaturas bajo cero, siempre que hayan sido adaptados previamente. La jaula nunca debe colocarse a pleno sol ni cerca de estufas o radiadores. A partir de 25°C de forma continuada, se encuentran incómodos, dejan de comer y aumentan el consumo de agua; si la temperatura alcanza los 35°C, empiezan a producirse problemas de salud y pueden morir en pocas horas.

La alimentación de los conejos enanos es muy sencilla: heno de buena calidad y frutas y verduras frescas que pueden colgarse de la parte superior de la jaula y pienso compuesto que se le suministrará en un comedero. El agua puede proporcionarse en un biberón que se coloca en el exterior de la jaula.